Framber Valdez sigue trillando el camino de las estrellas. Está dominando ampliamente el escenario, mientras los Astros de Houston se niegan a darle contrato de largo plazo.
Este año, por ejemplo, Valdez está actuando bajo pacto simple de una temporada por US$18 millones, acordado por las partes en el sistema de arbitraje. Pero Valdez se merece algo más en el actual mercado de grandes sumas de dinero.
Tiene solo 31 años de edad, es decir que Houston pudiera comprarle su próximo período de 5 años para darle seguridad ambiental y económica. De hecho, desde que entró a liga mayor en 2018 solo ha lanzado para Houston, mostrando excelente marca de 76-45, efectividad de 3.26, con promedio de 8.8 ponches por cada 9 entradas lanzadas.
Este domingo, el zurdo nativo de Sabana Grande de Palenque, provincia San Cristóbal, trabajó 6 innings de 5 hits, 0 cerreras, en el triunfo de Houston 2 por 0 sobre los Cachorros. Eso le permite poner su marca de la campaña en 9-4 y 2.72 de efectividad, con 108 ponches en 109 innings. En sus últimas 7 salidas tiene 6-0 y 1.57 de efectividad con 49 ponchados en 46 entradas.
Houston se afianza en el liderato de la División Oeste de la Liga Americana con 50-34, con ventaja de 6 y medio sobre los Marineros de Seattle.
EN MALA: En la otra cara de la moneda tenemos a Luis Severino cruzando “el Niágara en bicicleta” con los Atléticos de Sacramento. Este domingo, Severino lanzó en Nueva York, ante su antiguo club de los Yanquis, y no le fue nada bien. Los Yanquis ganaron 12 por 5, y Severino permitió 5 hits y 6 carreras en 3.2 innings, incluyendo par de cuadrangulares. Ahora, su marca se coloca en 2-9 y 5.18 de efectividad, y ya se ha quejado públicamente de que uno de los factores que han incidido en su mal año ha sido el estadio de Sacramento, donde los Atléticos juegan por un período de 3 años, hasta se construya su nuevo parque en su nuevo hogar, la ciudad de Las Vegas. “Eso parece como si uno estuviera en un los entrenamientos”, ha dicho Severino.