Por Israel Figueroa.
Al día siguiente de recibir la terrible noticia de la muerte de su madre, luego de pasar más de un mes en el Centro de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telecomunicaciones (CEDIMAT), la señora Teresa de Jesús Vargas Rodríguez tuvo que esperar cinco horas para recibir la factura de RD$1,800,000.00 para honrar los honorarios médicos.
En el testimonio que figura en el expediente, donde un tribunal condenó a CEDIMAT al pago de una indemnización de RD$15,000,000.00 a favor de Ramón Aquiles Vargas y Teresa de Jesús Vargas Rodríguez, esposo e hija de la señora Paula Antonia Rodríguez Morales, por mala práctica médica indica que la sepultaron un jueves, y el lunes siguiente ya le estaban llamando de una oficina de abogados para cobrar el dinero.
“Yo llevé viva a mi madre a ese lugar, no fue con un derrame cerebral, no fue con un ataque al corazón, fue una operación programada y me estaban cobrando como que me la estaban entregando sana. Yo metí a mi mamá a CEDIMAT para mejorar su calidad de vida, y me la entregaron muerta” manifestó.
También cuenta que desesperada, dos meses después, producto de la presión recibida, se motivó a acudir al Ministerio de Salud Pública, a su departamento de quejas y denuncias, donde abrieron una investigación que nueve meses después arrojó resultados que fueron judicializados y lograron la condena del CEDIMAT.
“Sin ninguna piedad, ni humanidad” le informaron que si quería retirar el cuerpo tenía que dar una cantidad fuerte, y tuvo que depositar RD$500,000.00.
El procedimiento