El problema principal de analizar en beisbol es que, por una parte, una serie corta “la gana cualquiera” y eso ha quedado comprobado cientos de veces. Y lo segundo es que esto sucede así porque el beisbol es impredecible.
El hecho de que Toronto y Marlins no hayan bateado nada habla en forma precisa de estas premisas. Me reì mucho unas declaraciones de Alex Rodríguez, previas a las series de wild card, en las cuales decía los motivos por los cuales había que tener presente a los Azulejos de Toronto a largo plazo. “Cuando esa ofensiva despierte habrá mucho baile, y Vladi Jr. tiene la responsabilidad de encabezar ese despertar” dijo Alex. Todo salió al revés.
Tampa tenía dos buenos pitchers para sus dos primeros juegos, Tyler Glasnow y Zach Eflin, pero de nada les valió porque no pudieron batear a Jordan Montgomery ni a Nathan Eovaldi. Arizona sorprendió a Milwaukee con un dominio convincente, juntando muchas cositas y buen pitcheo de relevo. Se sabía, también, que los Marlins "no salían" con los Filis, y así sucedió.
Y noten esto: dos de las series fueron ganadas 2-0 por los equipos visitantes, Texas a Tampa y Arizona a Milwaukee. Porque en beisbol no tiene gran valor ser local, al menos en play off. Lo que más cuenta es contar con buenos pitchers abridores, que lancen bien 6 innings, más o menos.
SEGUNDA FASE: Ahora vamos a la segunda fase, con series de 5-3 que enfrentan a los ganadores de wild card con los campeones divisionales. Se supone que si usted ganó una división es más fuerte que los demás, pero no se aplica 100% al momento de los análisis.
¿Por qué? Porque muchos equipos han sufrido cambios de jugadores, muchos están ausentes por lesiones o fueron cambiados durante el mes de julio.De hecho, todavía no se sabe cuàndo podrá lanzar Max Scherzer, de Texas, y es conocida la historia de Wander Franco, entre otros. Además, están las tantas lesiones de gente relevante en el pitcheo de los Dodgers.