Santo Domingo.- El color habitual de la orina varía según la cantidad de agua que tomas, ya que los fluidos diluyen los pigmentos amarillos del líquido.
Por eso, cuanta más agua consumes, más clara es la orina. Cuando bebes menos, el color amarillo es más intenso.
Observando su color podemos determinar cómo anda nuestra salud “si estás orinado y notas el color amarillo oscuro puede significar que estas deshidratado y no estas tomando suficiente agua”, explicó a El Día, el doctor Ronald Valdez Imbert, coordinador del Departamento de Nefrología de los Centros de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (Cedimat).
Los colores
• Transparente o muy claro: En la mayoría de los casos es síntoma de que la persona está bebiendo mucha agua, pero también puede estar relacionado con otros trastornos asociados a la diabetes.
• Ambarino claro: Normal.
• Miel: Puede ser indicativo de deshidratación.
• Marrón oscuro: Podría deberse a una deshidratación severa, al consumo de sustancias tóxicas o a algún tipo de enfermedad hepática. En estos casos, es conveniente acudir al médico para descartar la presencia de sangre en la orina y evaluar si el color se relaciona con algún trastorno metabólico.
• Rojizo o rosado: Puede deberse a la ingesta de alimentos como los arándanos o la remolacha. Si esto está descartado, podría relacionarse con la presencia de sangre, que siempre es subsidiario de ser estudiado.
• Verde o azul: Podría estar relacionado con determinadas infecciones, con algunas bacterias en el tracto urinario, alguna sustancia con propiedad de tinción o ciertos medicamentos.
Según lo detallado el color de una orina normal es el ambarino claro, que es síntoma, además de un buen estado de salud urinario, de una correcta hidratación.
Retención de la orina
Valdez Imbert explico además, que es malo retener la orina por un tiempo prolongado, ya que puede predispone infecciones urinarias y estas pueden pasar a ser severas, migrar a la sangre y llevar a hospitalizar el paciente.
El doctor Ronald Valdez Imbert, coordinador del Departamento de Nefrología de los Centros de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (Cedimat).
En esta situación el paciente puede pasar a un estadio crítico, que a la larga afectará al riñón.
Enfermedad Real Crónica
Millones de personas en todo el mundo padecen de la enfermedad renal. La misma se produce cuando los riñones no funcionan correctamente y pierden su capacidad de filtrar y eliminar los desechos del cuerpo.
Valdez explicó que los riñones desempeñan un papel crucial en la eliminación de desechos y toxinas del cuerpo, así como en la regulación de los niveles de líquidos y minerales, la presión arterial y también produce eritropoyetina, la hormona que estimula la producción de glóbulos rojos.
Entre el ocho y el diez por ciento de la población presenta problemas renales y en la mayoría de los casos no está diagnosticado.
“En los últimos años en República Dominicana se han disparado los indicadores de las ERC, se estima que entre el ocho y el diez por ciento de la población presenta problemas renales y en las mayoría de los casos no se encuentra diagnóstico”, dijo el experto.
Según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), las muertes a causa de enfermedad renal crónica ocupó el lugar número seis y en países como Estados Unidos nueve de cada diez personas adultas que padecen el malestar no saben que lo tienen.
El nefrólogo acotó que el principal motivo para acudir a la consulta es la elevación de la creatinina en sangre la cual es descubierta en algún momento de una evaluación médica.
Esta puede ser causada por condiciones subyacentes como la hipertensión arterial no controlada, la diabetes, infecciones recurrentes del tracto urinario, enfermedades autoinmunes, consumo excesivo de alcohol, tabaquismo, el uso prolongado de ciertos medicamentos, como los antiinflamatorios no esteroideos (AINEs), antibióticos como los aminoglucósidos y el uso de drogas ilícitas.
Existen factores genéticos y hereditarios que pueden predisponer a una persona a desarrollar esta condición.
Valdez enfatizó en la importancia de los “chequeo rutinario”, puesto que a menudo, los síntomas de la enfermedad renal crónica no se manifiestan hasta que está en etapa avanzada, lo que destaca la importancia de la detección temprana y el tratamiento adecuado.
Síntomas
El nefrólogo señaló que en las etapas iniciales puede no presentar síntomas evidentes, por esto es crucial las visitas periódicas a un médico especialmente si tiene una condición de base de riesgo.
A medida que esta progresa, algunos signos pueden aparecer, como la fatiga, la hinchazón en las extremidades, cambios en la frecuencia y cantidad de orina, presión arterial alta, pérdida de apetito, náuseas y vómitos, y problemas de sueño.
En estadios avanzados, las personas tienen que ser sometidas a terapia de reemplazo renal conocidas como hemodiálisis y diálisis peritoneal como mantenimiento de vida para prepararlos para un eventual trasplante renal en pacientes candidatos.
El diagnóstico de la enfermedad renal se hace a través de pruebas de laboratorios, que dependiendo el tiempo de evolución que tenga va a diferenciar entre agudo o crónico.
Edilí Arias@eldia