Un excomandante de la policía haitiana que encabezó el golpe de estado en su país en 2004 y que más tarde fue electo para un escaño en el Senado, está próximo a salir de la cárcel de Estados Unidos, donde paga una condena por embolsarse más de 1 millón de dólares de traficantes de cocaína colombianos, y ser deportado a Haití.
Guy Philippe fue capturado en enero de 2017 a poco más de un mes de ser elegido como senador del departamento de Grande Anse (suroeste de Haití) y después de ser perseguido por más de 10 años las autoridades estadounidenses.
Arrestado, Philippe llegó a un acuerdo de culpabilidad con los fiscales federales en Miami, pero eso no lo detuvo a intentar en varias ocasiones para reducir su sentencia de nueve años mientras se representaba a sí mismo antes y durante la era de la pandemia, según recoge el Miami Herald.
El hombre, de 55 años, tenía programada su salida de una prisión federal en Atlanta para luego ser transferido a la custodia de inmigración de Estados Unidos, y finalmente ser deportado a territorio haitiano, en medio de una crisis sistémica acentuada por el asesinato del presidente Jovenel Moïse en julio de 2021 y la violencia de las pandillas.
El medio estadounidense resalta las preocupaciones que provoca el regreso de Philippe a territorio haitiano mientras los Estados Unidos y la comunidad internacional tratan de estabilizar la situación de seguridad en el país caribeño.
"No estoy lo suficientemente cerca de la situación como para comentar sobre los hechos, pero este parece un momento particularmente malo para agregar gasolina a un incendio furioso", dijo Jim Foley, un diplomático retirado que se desempeñó como embajador de Estados Unidos en Haití entre 2003 y 2005, tiempo durante el cual Philippe encabezó un sangriento golpe contra el entonces presidente en funciones, Jean Bertrand Aristide.
Coincidiendo con Foley, Luis Moreno, jefe adjunto de misión en Puerto Príncipe de 2001 a 2004 consultado por Miami Herald, señaló que dado la peligrosa situación que atraviesa Haití "es incomprensible cómo alguien pueda pensar que esto fue una buena idea. Tal vez hay algo que no sé".
"Todavía tiene influencia. Todavía tiene armas. Todavía tiene acceso al narcotráfico", dijo Moreno, que agregó que el hombre "también tiene intensas aspiraciones y ambiciones políticas. Quiere ser el gobernante de Haití, quiere ser el dictador de Haití. Siempre ha sido su sueño y su objetivo. Y eso es peligroso".
AP