Las pérdidas sufridas por las tropas ucranianas durante la última semana ascienden a 14.560 uniformados, informó el viernes el Ministerio de Defensa ruso.
En particular, las bajas enemigas en la zona de responsabilidad del Grupo de Fuerzas Norte se estiman 2.765 militares. Mientras, unidades del Grupo de Ejércitos Oeste repelieron 12 contraataques y eliminaron a 3.450 soldados ucranianos. A su vez, las unidades del grupo de tropas Sur mejoraron la posición a lo largo de la línea del frente; derrotaron a cuatro infanterías mecanizadas y motorizadas, tres brigadas de asalto, dos aeromóviles y una brigada de defensa terrestre, causando hasta 3.825 bajas para el Ejército ucraniano.
Como resultado de la acción activa de las unidades rusas del grupo de tropas Centro, se liberaron los asentamientos de Lisíchnoye, Ivánovka y Sergéyevka en la República Popular de Donetsk. 20 contraataques de unidades enemigas fueron repelidos.
El Ministerio de Defensa ruso reveló también las bajas de las Fuerzas Armadas ucranianas en la provincia de Kursk desde que estas emprendieron la semana pasada un intento de incursión en la zona. En total, durante los combates en esa zona, el enemigo perdió hasta 2.860 soldados, 41 tanques, 40 vehículos blindados de transporte de tropas, 23 vehículos de combate de infantería, 213 vehículos blindados de combate, 102 vehículos, cuatro sistemas de misiles antiaéreos, seis lanzamisiles múltiples, incluidos tres HIMARS, dos vehículos de transporte de carga, 22 cañones de artillería de campaña y tres estaciones de guerra electrónica.
En la ofensiva a Kursk participaron casi 12.000 combatientes ucranianos, según el comandante de las fuerzas especiales rusas Ajmat, Aptí Alaudínov. Los militares rusos lograron impedir su avance y eliminaron un gran número de efectivos y equipos bélicos ucranianos en la zona.
RT