La Casa Blanca informó que el despliegue fue ordenado por el presidente Donald Trump de cara a las protestas registradas en el estado gobernado por los demócratas contra las redadas del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) que realizan para detener a migrantes irregulares.
"A raíz de esta violencia, los irresponsables líderes demócratas de California han abdicado por completo de su responsabilidad de proteger a sus ciudadanos", argumentó la Casa Blanca en un breve comunicado.
La Administración republicana señaló que tendrá "tolerancia cero para el comportamiento criminal y la violencia", en específico cuando se dirija contra los agentes de la ley. Por ello, advirtió que los "criminales serán arrestados y llevados rápidamente ante la justicia".
Momentos antes, el mandatario republicano se comprometió a reprimir las manifestaciones en la entidad.
SPUTNIK