Nueva York es la ciudad más cara para residir en EE.UU. debido por encima de todo al costo de la vivienda, entre renta y comisiones.
En promedio, los neoyorquinos desembolsan 15% de su alquiler anual en honorarios del agente inmobiliario (broker fee). Buscando un alivio para los inquilinos, ayer el Concejo Municipal aprobó un proyecto de ley que pasaría a los caseros el pago de esos honorarios, pero no todo el mundo piensa que será una buena idea.
El proyecto “Ley de Equidad en el Alquiler de Apartamentos” (Fairness in Apartment Rentals Act, FARE) establece que quien contrate al agente inmobiliario, ya sea el inquilino o el propietario, estaría obligado a pagar los honorarios, explicó ABC News. La legislación, que se aprobó en una votación contundente de 42 a favor y 8 en contra, podría entrar en vigor en tan sólo 180 días (6 meses), si es aprobada por el alcalde Eric Adams.
El alcalde, quien antes fue agente inmobiliario, adelantó el martes en su conferencia de prensa semanal que “El proyecto de ley tiene la intención correcta, pero a veces las buenas intenciones no obtienen los resultados que uno busca”. En concreto, alertó que esta ley podría llevar a aumentos “permanentes” del alquiler si los propietarios trasladaran una parte del “broker fee” a los inquilinos cada mes “porque no hay nada en el proyecto de ley que diga que no pueden hacer eso”. “Piensen un momento: si se traslada el costo a los pequeños propietarios, nada en esa ley les impide incluirlo en su alquiler, de modo que pase de ser una tarifa única a una tarifa permanente”.
La presidenta del Concejo Municipal, Adrienne Adams, apoyó el proyecto de ley y dijo que los legisladores estaban preparados para anular un veto del alcalde si fuera necesario. Afirmó que estaba sorprendida por los comentarios del alcalde porque su gobierno había sido parte de las negociaciones antes de la votación y no había planteado objeciones importantes, destacó The New York Times.
Según la propuesta legal, los propietarios y sus agentes revelarían los honorarios en los listados y contratos de alquiler. En la mayoría de las ciudades los caseros son quienes pagan esas comisiones.
Los opositores a la legislación dicen que la medida podría conducir a alquileres más altos y argumentan que los propietarios podrían incluir los honorarios del agente inmobiliario en los alquileres mensuales, excepto en los apartamentos con alquiler estabilizado, donde un panel de designados por la alcaldía establece los aumentos. El último incremento en ese sector entró en vigencia el 1 de octubre de 2024, por 3er año consecutivo, afectando a alrededor de un millón de viviendas en la ciudad de Nueva York
La votación se produjo en un momento en que los alquileres en la ciudad de Nueva York siguen aumentando, lo que añade presión a los bolsillos del ciudadano medio.
La Junta de Bienes Raíces de Nueva York (REBNY) se opone al proyecto de ley y emitió la siguiente declaración: “La votación del miércoles es otro ejemplo de priorizar la ideología sobre la realidad económica y práctica cuando se trata del sector de viviendas de alquiler de la ciudad. La Ley FARE dificultará a los inquilinos encontrar vivienda, aumentará los alquileres y dificultará aún más el duro trabajo de los agentes inmobiliarios. REBNY seguirá buscando todas las opciones para luchar contra esta legislación perjudicial en nombre de nuestros miembros y de los inquilinos a los que sirven”.
ELDIARIONY