La crítica situación que experimentan desde el pasado fin de semana dos dirigentes de la Federación de Pentatlón Moderno, ante la justicia ordinaria, tras ser apresados como si fueran delincuentes comunes en un allanamiento al local de la entidad, y en sus hogares, debe poner a cavilar al movimiento olímpico sobre qué está pasando a lo interno para que ocurran estos hechos.
Desde hace tiempo se había estado denunciando irregularidades en esa y otras federaciones, sin que al parecer se tomaran correctivos para que la situación no llegara a extremos muy delicados como ese.
Sorprende la prisión de Freddy Núñez Jorge, presidente de la federación, un exoficial de la Armada (antigua Marina de Guerra), y a quien traté cuando se desempeñó por un tiempo como periodista deportivo.
El Comité Olímpico debe estar muy preocupado por este allanamiento, porque las cosas podrían derivar en situaciones peores para todo el movimiento, dado que hay otras federaciones que están en el ojo del huracán.
Mientras se sigan produciendo e incrementando las fricciones entre miembros y asociados al COD, cualquier cosa puede ocurrir.
Ojalá que el Ministerio Público dé a conocer los resultados de las investigaciones que realizó en esa federación, para que se conozca la realidad y no se siga especulando sobre las causas reales que provocaron los allanamientos, y posterior apresamiento de ambos dirigentes.