El entusiasmo inicial por estas innovaciones se transformó rápidamente en escarnio cuando muchos notaron semejanzas con el film de 2004 Yo, Robot. Según The Hollywood Reporter, “las redes sociales no tardaron en acusar a la compañía de copiar los diseños encontrados en la película”, protagonizada por Will Smith.
Pero lo que más llamó la atención fue que el director de la película, Alex Proyas, se unió a las críticas al compartir en X: “Hey Elon, ¿puedes devolverme mis diseños, por favor?” Este sentimiento fue eco en otras voces dentro de la producción del film, como el cineasta Matt Granger, quien trabajó como asistente de Proyas.
“Yo también deseo ofrecer mi completo dedo medio de ‘jódete’ a Elon y su absoluta falta de creatividad”, expresó Granger. Y es que la coincidencia visual entre los diseños de Tesla y los del film de 2004 no es muy difícil de notar, especialmente en el Optimus y el NS5 robótico de la película.
A pesar de la polémica, el evento también sirvió como plataforma para destacar el potencial de Optimus en tareas domésticas. The Hollywood Reporter informa que el robot fue capaz de realizar actividades como “recoger paquetes en la puerta de una casa, regar plantas y participar en juegos de mesa”.
Al demostrar su habilidad en un entorno familiar, incluso sugirieron posibles roles educativos. Musk señaló que el precio del Optimus “se situará entre 20.000 y 30.000 dólares a largo plazo”.
Otro punto importante del evento fue la presentación del Cybercab, un vehículo totalmente autónomo que carece de volante o pedales. Según la misma fuente, su diseño “se inspira en el aspecto futurista del Cybertruck” y está orientado a ofrecer movilidad completamente autónoma para dos pasajeros.
Junto a este, el Robovan busca liderar el transporte colectivo al poder llevar hasta un total de veinte personas. Estos lanzamientos reflejan la visión de Musk de un futuro de movilidad sin conductores humanos, ampliando la gama de vehículos autónomos de Tesla.
AGENCIAS