La Paz. Más de mil adultos mayores en Bolivia se capacitan en nuevas tecnologías, gastronomía y asesoramiento legal, entre otras áreas, para incorporarse en alguna actividad económica o que les permita tener una “vejez digna” e «independiente» en actividades cotidianas, en un país en donde 6 de cada 10 personas mayores de 65 años trabajan, la mayoría en la informalidad.
La Universidad del Adulto Mayor de la municipalidad de La Paz, sede de Gobierno, es la entidad que brinda a personas de la tercera edad esas oportunidades para aprender a desarrollar nuevas habilidades.
Aurora Bracamonte, quien fue estudiante de esta universidad, actualmente dicta clases de gastronomía y chocolatería a personas de su generación. Para ella, la vejez «es una cuestión de actitud» y por eso no hay que vivir «como viejos».
«Me solidarizo con mis compañeras que solo viven con su renta dignidad, entonces aprender a hacer chocolate artesanal hace que ellas puedan generar recursos y esa es mi gratificación», dijo a EFE Aurora al comenzar su taller.
La renta dignidad es una pensión vitalicia que el Estado otorga a los bolivianos mayores de 60 años que no reciben jubilación. El monto es de 4.550 bolivianos anuales (658 dólares).
El secretario de Educación y Desarrollo Social de la Alcaldía de La Paz, Jaques Alcoba, contó a EFE que actualmente la Universidad del Adulto Mayor tiene 1.107 estudiantes mayores de 60 años que reciben clases de tecnología, gastronomía, computación, inglés y asesoramiento en derecho, entre otros, de forma gratuita.
«Es muy emotivo ver cuando estas personas están en un entorno de aprendizaje, dicen que ellas ya no pueden estudiar, que ya no producen, que son obsoletos para la sociedad y con esta universidad hemos roto ese mito porque cada vez tenemos más estudiantes», enfatizó.
Una de las clases más demandadas es la de nuevas tecnologías, en el horario de la mañana hay unos 15 estudiantes, cada uno con su celular en la mano y con un cuaderno de apuntes en la mesa.
«Hoy en día es necesario aprender tecnología para podernos comunicar con las demás personas, aprender nuevas aplicaciones y también disfrutamos porque en momentos libres ya podemos mandar mensajes, chistes y meses», comentó a EFE Angélica Polo.
En Bolivia existen alrededor de 1.267.190 adultos mayores, según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) y que equivale al 10,1 % de la población del país.
Alcoba precisó que la proyección de envejecimiento al año 2030 es de un 5 % y que en La Paz el 12 % de la población es adulta mayor, eso significa 109 mil personas.
Danza y fisioterapia para activar el cuerpo
En el cuarto piso del edificio principal de la universidad está el salón de danza, allí hay una decena de mujeres de la tercera edad que cantan y bailan danzas folclóricas bolivianas.
«Es mi segundo año y la universidad ha sido una bendición, hemos crecido espiritualmente, tenemos nuevas amigas, la verdad de que la edad es solo un número y la danza nos llena de salud», afirmó a EFE Cecilia Vargas.
Ella y sus compañeras forman parte del ballet oficial de la universidad, pero también algunas se inscribieron a clases de nuevas tecnologías y orientación legal, actividades que las mantiene ocupadas toda la semana.
Los adultos mayores tienen acceso a sesiones de fisioterapia por dolencias como la artrosis, que es común en la tercera edad, y tienen sesiones colectivas de ejercicios para estirar los músculos.
En algunas ocasiones, como en el caso de Néstor Herbas, la fisioterapia le ayudó luego de sufrir un accidente de tránsito.
«Paso clases desde 2021, el año pasado tuve un accidente, pasé fisioterapia y he dejado las muletas y el bastón gracias a las sesiones», indicó a Herbas.
AP