Moisés Rodríguez, neoyorquino de raíz dominicana, murió a los 30 años la madrugada del lunes, convirtiéndose en el 5to ahogamiento fatal este verano en las playas públicas de NYC, cifra que ya supera las cuatro víctimas de todo el año pasado.
Antes de morir en Rockaway Beach (Queens), Rodríguez estuvo hablando por teléfono con su madre, quien se encontraba en República Dominicana, y publicando videos TikToks de él mismo sentado en la arena y entrando al océano. Horas después fue encontrado flotando cerca de la costa en Beach 96th St. alrededor de las 12:30 a.m. del lunes.
Los paramédicos realizaron reanimación cardiopulmonar (RCP) y lo llevaron inconsciente al St. John’s Hospital, donde lo declararon muerto, dejando huérfana una niña de 4 años que vive con su madre en Alabama. En la orilla de la playa se encontraron ropa y otras pertenencias personales suyas. Una autopsia del médico forense de la ciudad (OCME) debe confirmar la causa de la muerte.
Rodríguez no tuvo una vida fácil, según su madre, Mildred Rodríguez, de 58 años. Sufría de trastorno bipolar y estrés postraumático después de ser dado de baja del Ejército en 2018. También luchó contra el alcohol.
A pesar de sus problemas de salud mental, la madre no cree que su hijo tuviera la intención de morir el lunes. Para ella fue el consumo de alcohol lo que provocó su muerte. “Estoy realmente en shock”, dijo. “Acabo de ver una foto de él el domingo. ¡Se lo estaba pasando bien en la playa!
El domingo por la tarde llamó a su madre diciéndole que necesitaba su ayuda para otra persona. “Me llamó y me dijo que había conocido a una señora y me pidió que la ayudara a completar los trámites de SNAP y Medicaid”, dijo la devastada madre, cuyo trabajo es ayudar a los neoyorquinos a obtener beneficios sociales.
Nacido en Washington Heights, el gran barrio quisqueyano del Alto Manhattan, Rodríguez y su madre se mudaron a República Dominicana cuando él era joven, pero regresaron a Nueva York cuando tenía cinco años.
Después de graduarse de la escuela secundaria se unió al Ejército y pasó dos años y medio en Fort Benning (Georgia), pero según su madre no era el mismo cuando regresó. “Estaba saltando de aviones”, dijo Mildred sobre el período militar de su hijo. “Le sucedieron muchas cosas mientras estaba en el Ejército, pero nunca me dijo realmente qué pasó”. Además tenía tomar medicamentos dormir además de hacer frente a su enfermedad mental.
ELDIARIONY