Las infecciones de orina suelen ser afecciones muy incómodas y que pueden resultar realmente dolorosas, además, de que se presentan en cualquier parte del sistema urinario, que incluye los riñones, los uréteres, la vejiga y la uretra, aunque la mayoría afectan a las vías urinarias inferiores (la vejiga y la uretra), las mujeres corren un mayor riesgo de padecerla que los hombres.
Aunque las infecciones no siempre presentan síntomas, cuando sí se muestran suelen entrañar los siguientes:
Una fuerte necesidad de orinar que no desaparece, Sensación de ardor al orinar, Orinar frecuentemente en pequeñas cantidades, Orina de aspecto turbio, Orina de color rojo, rosa brillante o amarronado (signos de sangre en la orina), Orina con olor fuerte, Dolor pélvico en las mujeres, especialmente en el centro de la pelvis y alrededor de la zona del hueso púbico.
Cómo evitar las infecciones de orina
Las complicaciones aparecen si la infección se extiende a los riñones, que es cuando verdaderamente provoca graves problemas para la salud. El tratamiento más utilizado contra estas infecciones son los antibióticos, aunque también podemos tomar una serie de medidas para prevenirla.
Para evitarlas, es fundamental proteger y reforzar nuestro organismo con ciertos alimentos:
Arándanos y moras: previenen las infecciones de orina impidiendo que las bacterias se peguen a la pared de la vejiga
Alimentos ricos en vitamina D: La vitamina D es fundamental para los glóbulos blancos, que son la parte del sistema inmunitario encargada de combatir las infecciones y otras enfermedades. Encontramos vitamina D en pescados grasos como el salmón, el atún o la trucha.
Vegetales verdes: evitan el estreñimiento favoreciendo un tránsito intestinal normal, por lo que previene la acumulación de bacterias que puedan dirigirse a las vías urinarias. Hablamos de las lechugas, las espinacas, las acelgas, el brócoli o la coliflor.
Agua: beber 8 vasos de agua al día (el equivalente a 2 litros) es crucial para proteger nuestro organismo. En la vejiga se acumulan múltiples bacterias que han de ser eliminadas mediante la orina. Además, beber la cantidad recomendable de agua hará que la orina sea más diluida y de un color más claro (cuanto más amarillo es el orín, mejor viven las bacterias).
Lactobacilos: son bacterias presentes en el yogur natural o el kéfir y protegen al cuerpo de otras bacterias no amigables.
Qué causa las infecciones de orina
La infección de orina se produce cuando entran bacterias en las vías urinarias a través de la uretra y comienzan a propagarse en la vejiga. Así, las bacterias pueden proliferar hasta convertirse en una infección totalmente desarrollada en las vías urinarias.
Si la vejiga es la que está infectada, suele ser por la bacteria Escherichia coli, que se encuentra frecuentemente en el tracto gastrointestinal. Tener relaciones sexuales también puede llevar a una infección de la vejiga, pero no es necesario tenerles para desarrollarla.
Los expertos aconsejan pasar por el baño para orinar y lavarse después de tener un encuentro sexual para evitar correr el riesgo de contraer una infección.
Si la uretra es la que está infectada, es porque las bacterias del tracto gastrointestinal se han desplazado desde el ano hasta la uretra.
La causa de una infección de la uretra también puede ser una infección de trasmisión sexual. Por ejemplo, herpes, gonorrea, clamidia y micoplasma. En parte se explica porque las uretras de las mujeres están cerca de la vagina.
AGENCIAS