(Desde Santiago, Chile) Un loable gesto, de esos que pocas veces suceden y devuelven la fe en el ser humano, tuvo un humilde recolector de basura de la gélida ciudad de Punta Arenas (3.000 kms al sur de Chile), en la región de Magallanes, tras devolver un bolso con más de $27 millones (USD casi 30 mil), en dinero contante y sonante, que encontró botado en la vía pública.
La noche del lunes pasado, Belarmino Parra Álvarez, quien cumplía como de costumbre con sus labores de recoger los desperdicios de la ciudad, encontró un bolso que estaba sobre una banca frente a un pub del centro de la ciudad. Gigante sería su sorpresa al abrirlo y encontrar en su interior, perfectamente atados, cientos de billetes de $10 mil y $20 mil, según consigna una nota del diario local El Magallánico.
Sin pensarlo dos veces, Parra le contó al chofer del camión sobre su hallazgo y y de inmediato además llamó al supervisor de la empresa en la que trabaja, pues si intención era devolver el bolso tal y como lo había encontrado.
Así, ambos acordaron reunirse de inmediato en el cuartel de la Policía de Investigaciones (PDI). Tras explicar el caso a los detectives, y luego de algunas averiguaciones, minutos más tarde dieron con el dueño del dinero, quien se apersonó raudo en la sede policial.
Tras contar los billetes y corroborar que no faltaba ni una “luca” (popular billete de mil pesos), el aliviado propietario explicó que la abultada suma correspondía al finiquito que le habían entregado por años de trabajo, por lo que agradeció, desde el fondo de su corazón, el íntegro actuar del honesto trabajador.
“Enseñarle a mi hijo lo que es la honradez”
Consultado por medios locales, Parra relató estar “feliz por hacer ese buen acto y una vez más enseñarle a mi hijo lo que es la honradez. Siempre le enseño a mis hijos que si encuentran algo, hay que devolverlo”.
En tanto, Julio Castro, su supervisor, indicó que “destaco al personal de guardia que estaba en la PDI anoche porque actuaron con mucha rapidez, en menos de media hora tenían al dueño del bolso acá, a quien le volvió el alma al cuerpo. Entre risas y lágrimas lo único que hacía era agradecer”.
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