AHORA MAS GRANDE Y AL MISMO PRECIO DE UNA PEQUEÑA

AHORA MAS GRANDE Y AL MISMO PRECIO DE UNA PEQUEÑA

viernes, enero 5

El oscuro futuro de Oscar Pistorius a horas de salir en libertad condicional: dónde vivirá, el temor a una venganza y una inquietante revelación

 


Oscar Pistorius asesinó a su novia, Reeva Steenkamp, en la madrugada del día de los enamorados de 2013. A la espera de un nuevo aniversario del fatal hecho, el deportista está a pocas horas de abandonar la prisión de Atteridgeville, en la ciudad sudafricana de Johannesburgo. Este 5 de enero saldrá de la cárcel en medio de un oscuro futuro y el miedo a una venganza latente.


El periodista Jonathan McEvoy repasó su porvenir en una extensa columna para el diario inglés Daily Mail, en la cual describe el rotundo deterioro físico de un atleta que, antes del suceso policial, era considerado un ejemplo de superación tras sufrir la amputación de sus piernas a once meses de su nacimiento: “Saldrá como un fumador empedernido, canoso y barrigón, amenazado para siempre por el inframundo, además de un asesino convicto”.


El acusado pasó nueve años en prisión después de ser juzgado por el delito de haber matado a tiros a su pareja, quien cursaba un embarazo de tres meses, según dio a conocer tiempo atrás el periódico Daily Star, pero el beneficio ganado en la Justicia para la libertad condicional no será su “verdadera libertad”, sino todo lo contrario. Vivirá a 24 millas al este del complejo penitenciario, en una cabaña con jardín detrás de altos muros.


La finca vigilada pertenece a su tío Arnold, un rico empresario ligado al costado inmobiliario y el turismo. En esa misma casa se quedó anteriormente mientras estaba en libertad bajo fianza. El hogar localizado en el suburbio de Waterkloof posee vallas eléctricas, una generalidad de todas las propiedades, que también cuentan con hombres de seguridad: “Es un lugar de amenaza silenciosa”.


El “incierto futuro” en una de las ciudades con mayor índice de criminalidad del mundo fue alertado por el reportero, quien no descartó que Oscar Pistorius sea “objetivo de represalias”. Una fuente intercambió sus opiniones con el interlocutor y dejó una inquietante declaración: “Nunca podrá ir a ningún lado por el resto de su vida sin mirar por encima del hombro”. En este sentido, la nota periodística aporta un dato inquietante: “La policía de Johannesburgo ha recibido información que sugiere que las pandillas de la ciudad buscan venganza por el asesinato de Reeva (Steenkamp)”


El deportista ya poseía ese temor desde su primera estadía en la casa de su tío, ya que se mantenía alejado de las ventanas para evitar ser asesinado por una bala. Dos de sus enemigos tuvieron implicancias en el juicio desarrollado en el Tribunal Superior de North Gauteng en 2014. Uno de ellos era el ex futbolista, Marc Batchelor, quien murió a manos de un “ataque mafioso”, mientras que el otro caso se trata de Mikey Schultz, un asesino a sueldo convicto acusado por intimidar e insultar a la hermana de Pistorius de manera amenazante.


Anteriormente, el recluso de 37 años sufrió heridas en una pelea con un compañero por un teléfono en 2017 y, un año antes, necesitó tratamiento en sus muñecas por caer aparentemente en su celda, aunque su familia negó que se tratase de un caso de autolesión.


Por otro lado, el perfil religioso de su tío Arnold (asiste a la Iglesia y su familia bendice la mesa en cada comida), podría haber sido uno de los motivos por el cual Pistorius se aferró a la fe cristiana, incluso animaba compañeros a leer la Biblia y adorar a Jesús: “Se habla de que se convertirá en predicador una vez que salga”.


El sudafricano deberá someterse a una terapia sobre el control de la ira y la violencia contra las mujeres hasta el final de 2029. “Las condiciones generales de libertad condicional se aplicarán a Pistorius. Por ejemplo, se espera que esté en casa a determinadas horas del día. No podrá consumir alcohol ni otras sustancias prohibidas”, estimó el Departamento de Servicios Correccionales de su país. Tendrá prohibida la asistencia a clubes nocturnos.


En el cierre de su columna, Jonathan McEvoy detalla un escalofriante relato sobre un almuerzo mantenido con él, donde pudo ingresar a su cuarto personal y vio un arma del mismo calibre con la que mató a Reeva Steenkamp: “A los ojos de este visitante británico, algunos elementos llamaron la atención. Bates de críquet y béisbol cerca de la puerta. Y una pistola negra, de 9 mm, al lado de su cama”. Le preguntó para qué las necesitaba al tener guardias de seguridad y el entrevistado le respondió: “Cuando los guardias están implicados en el robo es cuando necesitas las armas”.


INFOBAE