La investigación por el choque en pista el martes entre un vuelo comercial y un avión de la Guardia Costera en el que fallecieron cinco personas ha comenzado este miércoles en Tokio, en un suceso que deja, hasta el momento, cinco muertos y más de 300 vuelos cancelados.
La Comisión de Seguridad en el Transporte (JTSB) del Ministerio de Transportes de Japón, que investiga las causas de los accidentes aéreos, envió esta mañana a seis especialistas al lugar del suceso. Principalmente, para iniciar las pesquisas, en un caso en el que se sospecha de negligencia profesional.