Apesar de la gravedad del incidente, a los pasajeros del avión de Alaska Airlines, cuya ventana explotó en pleno vuelo, la compañía les ofreció $1,500 dólares de retribución.
A los viajeros se les notificó en un correo electrónico del paquete de compensación, precisa un reporte de Wall Street Journal.
No está claro si el dinero debe ser utilizado para un nuevo vuelo o es adicional a nuevos tiquetes.
Daniel Laurence, socio de la firma Stritmatter Firm en Seattle y quien representa a pasajeros de la misma aerolínea en otro caso, indicó a New York Post que los afectados en el vuelo 1282 el pasado viernes podrían incoar una acción legal por estrés emocional para tratar de obtener más dinero de la compañía.
“Como asunto moral, $1,500 por pasajero, por lo que pudo haber sido una experiencia de muerte e incluso podría describirse… como cercano a una experiencia de muerte, es inadecuado”, consideró Laurence. “Claramente tendrían un reclamo por angustia emocional que se les infligió”, añadió Laurence.
“De hecho, yo escuché de uno de los pasajeros esta mañana que estaba interesado en hablar conmigo sobre el incidente”, reveló el abogado.
La sección de la puerta lateral explotó cuando el avión Boeing 737-9 Max se encontraba a unos 16,000 pies de ascenso tras despegar de Portland, Oregon, con destino a Ontario, California.
Unos 20 minutos después, el piloto aterrizó de emergencia en Portland debido a supuestos problemas de presión.
Vientos dejaron sin camiseta a un pasajero
Inmediatamente después del estallido, cayeron las máscaras de oxígeno. El viento era tan fuerte que le arrebató del cuerpo la camiseta a un viajero y la vestimenta salió por el hoyo.
Los gritos y el llanto de los pasajeros formaban parte del caos, y algunos de estos enviaron mensajes de despedida a sus seres queridos pensando que pasaría lo peor.
En declaraciones a CNN, Nick Hock, un pasajero de 33 años, describió la experiencia como traumática.
El hombre dijo que una especie de silbido por la niebla o las nubes le golpeó el rostro. “El cabello de la gente estaba volando por todo el lugar”, recordó.
Luego del “boom” inicial, el avión como se sacudió, según describió. “Estaba bastante sorprendido y asustado, y yo pienso que otros también estaban bastante perturbados”, añadió el sobreviviente que se encontraba un par de filas delante del área en la que explotó el panel.
“Había gente mucho más cerca, con las que hablé, que perdieron sus AirPods”, dijo.
En el avión viajaban 171 pasajeros y seis miembros de la tripulación. El vehículo aéreo aterrizó en Portland unos 20 minutos después de haber despegado. Alaska Airlines indicó en un comunicado el sábado que varios viajeros resultaron con heridas leves y tuvieron que recibir atención médica.
EFE