Las autoridades han capturado a Lenue Moore, el presunto responsable de dos asesinatos brutales en Washington Heights, Manhattan. Moore, de 31 años, fue descubierto escondido bajo una cama en un apartamento cerca de la escena del crimen.
Los oficiales lucharon con el sospechoso para sacarlo de su escondite, y finalmente, lo acusaron de dos cargos de asesinato, así como de crueldad animal. La jueza Marisol Martínez Alonso ordenó la detención sin derecho a fianza para Moore, quien es acusado de ejecutar a sangre fría a Jacqueline Billini, de 57 años, y Levaughn Harvin, de 42, el 29 de septiembre.
Las víctimas, quienes paseaban a sus perros cerca de la esquina de W. 165th Street y Edgecombe Avenue, fueron asesinadas de un disparo en la cabeza por Moore. Además, el agresor también mató al perro de Billini, llamado Zeus, a tiros, mientras los hijos de Harvin eran testigos de la escena.
El fiscal adjunto Joshua Steinglass solicitó la prisión preventiva para Moore, argumentando que el sospechoso había estado evitando a la policía durante semanas antes de ser finalmente ubicado en un apartamento cercano al lugar de los asesinatos.
Las autoridades indicaron que el sospechoso había tenido una larga disputa con su vecina, Jacqueline Billini, antes del trágico incidente. La discusión se centraba en los ladridos de los perros de Billini, y la tensión escaló cuando Moore pateó al perro de Billini y la amenazó con un martillo.
Posteriormente, Billini logró obtener una orden de protección contra Moore, obligándolo a mudarse a otro edificio. Según Steinglass, el asesinato de Billini después de su detención previa y la orden de protección muestra un absoluto desprecio por los procedimientos judiciales y se enfrenta a una posible cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional, lo que lo convertiría en un fuerte fugitivo.
Después del asesinato, Moore tomó un autobús y cambió su ropa para evitar ser capturado inmediatamente. Sin embargo, las autoridades lograron identificarlo a través de una cámara de seguridad que lo filmó usando su tarjeta MetroCard a principios de octubre. Finalmente, los detectives rastrearon a Moore hasta la casa de un amigo en Glendale, Queens, donde encontraron la ropa del acusado y una pistola Glock 9mm que coincidía con el arma homicida.