Un hecho extraordinario está por suceder en América Latina: Que México (país de larga tradición política machista) sea gobernado por una mujer llamada a prolongar la obra progresista, abierta al pueblo, del presidente López Obrador y su Movimiento de Regeneración Nacional, que puso fin a décadas de negación de las conquistas de la Revolución de 1910; una mujer que eleva en su discurso la igualdad como conquista fundamental del sistema democrático: Claudia Sheinbaum Pardo, la primera mujer que ha gobernado, con altos méritos, el inmenso Distrito Federal, la enorme capital del país, con sus más de veinte millones de habitantes.