Esta acción legal es el esfuerzo más significativo de las autoridades estatales para frenar el impacto de las redes sociales en la salud mental de los menores y para obligar a Meta a cambiar las características de sus redes por lo peligrosa que es, según afirman, para los usuarios más jóvenes.
Un total de 33 estados, entre otros Colorado y California, presentaron una demanda conjunta en un tribunal federal del Distrito Norte de California, mientras que otros fiscales generales de Washington D.C. y 8 estados están presentando denuncias separadas en tribunales federales, estatales o locales.
La lluvia de demandas tiene su raíz en una investigación de 2021 sobre las distintas maneras en que el titán tecnológico contribuye a problemas de salud mental entre los jóvenes.
En 2021, The Wall Street Journal expuso en un reportaje elaborado con información interna cómo Instagram empeoraba la percepción de los usuarios -sobre todo niñas y adolescentes- sobre sus cuerpos, y señaló que la compañía era consciente de este problema.
Desde entonces, algunos estados como Arkansas y Utah han aprobado leyes que prohíben el acceso de los niños menores de 13 años a las redes sociales y exigen que los adolescentes menores de 18 años obtengan el consentimiento de sus padres para acceder a los sitios.
Por su parte, California aprobó leyes que exigen que las tecnológicas examinen sus plataformas en busca de posibles riesgos y problemas.
EFE