Hunter Biden, hijo del presidente estadounidense, Joe Biden, fue formalmente imputado este jueves por tres cargos relacionados con la compra y posesión de armas, que en un contexto de persona con adicciones es ilegal.
El hijo del mandatario es señalado por mentir en el formulario que rellenó para adquirir un revólver calibre .38 en octubre de 2018, al negar que fuera un consumidor habitual de drogas o alcohol, de acuerdo con el acta de imputación que fue firmada por el fiscal federal de Delaware, David Weiss.
Formalmente, Hunter, de 53 años, fue acusado de hacer una declaración falsa en relación con la adquisición de un arma de fuego; poseer un arma de fuego siendo un adicto ilegal a sustancias controladas; y transferir un arma de fuego a una persona no autorizada.
El arma fue encontrada por las autoridades dentro de un contenedor de basura cerca de la casa de su exnovia, Hallie Biden, que era la viuda de su hermano Beau Biden, quien murió en 2015 por un cáncer cerebral. La policía también halló una caja con munición y dos licencias de conducir a nombre de Hunter Biden.
El hijo del presidente se declaró no culpable este jueves, quedando en libertad bajo fianza, mientras espera el inicio del juicio, cuya fecha exacta no se ha dado a conocer.
RT